Una conferencia impartida por D. Antonio Mª Cabrera Calero en el marco de las III Jornadas de Historia en Villanueva del Duque (Córdoba).
Reseña de la conferencia, por D. Julio López (Concejal de Cultura del Ayto. de Villanueva del
Duque):
Durante
las últimas décadas del siglo XIX una auténtica “fiebre del plomo” se extendió
por el territorio comprendido entre Villanueva del Duque y el río Cuzna.
Decenas de minas se pusieron en marcha y multitud de pozos se excavaron
buscando las riquezas del subsuelo. Las más importantes, las del grupo de El
Soldado, y las últimas en cerrarse, las Morras del Cuzna, aún están frescas en
nuestra memoria; pero Araceli, San Rafael, Reservada, Aguirre, Terreras,
Sagarminaga y muchos otros, son nombres caídos en buena parte ya, pasado más de
un siglo, en el olvido.
El
tiempo y la mano del hombre han ido poco a poco borrando los vestigios de
castilletes, casas de máquinas, escombreras, polvorines, lavaderos, poblados mineros,
construcciones muchas de las que no sólo desconocemos su nombre, sino también
su uso. Sin embargo, son estos vestigios materiales, cuando cada vez permanecen
entre nosotros un menor número de testigos de aquel pasado, quienes atestiguan
con su presencia y dan fe de lo que supuso para el municipio la llegada de las
compañías mineras, y con ellas de los adelantos técnicos, el ferrocarril, la
electricidad, el agua de la Garganta… También, como no, el empleo, el paro y
los conflictos sociales por mejorar las duras condiciones de los mineros.
La conferencia que nos ocupa intenta sacar a la
luz, por medio de multitud de imágenes, estos auténticos testigos de piedra del
pasado de la localidad, recordando de nuevo sus nombres y tratando de ilustrar
un poco sobre sus funciones. Es desde el conocimiento de su auténtico
significado como podremos valorarlos en su justa medida y, llegado el caso,
conservarlos para las generaciones venideras.
2 comentarios:
Información muy valiosa. Gracias por hacerla llegar a quienes no tuvimos la oportunidad de asistir a la conferencia.
Un saludo.
Gracias a ti, Antonio. Dar la máxima difusión al patrimonio minero e industrial de la sierra de Córdoba es fundamental, habida cuenta del estado general de abandono y peligro de desaparición en el que se encuentra.
Saludos.
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